«Ten cuidado de no llegar a ser «entusiasta» en tu afán por perseguir a la gente. No te figures que Dios te ha llamado para destruir la vida de los demás (esto es completamente opuesto al espíritu de quien llamas Maestro) en lugar de salvarlas. Nunca se te ocurra forzar a otros a entrar en los caminos de Dios. Piensa, y deja pensar. No obligues a nadie en cuestiones de religión. Aun a aquellos que se encuentran más alejados del camino, jamás los fuerces a entrar por otros medios que no sean la razón, la verdad y el amor.»
(Wesley, John. Sermón 37:37 -Obras de Wesley, editor general: Justo L. González)
Se puede descargar la obra de Wesley en la web del Instituto de Estudios Wesleyanos http://www.iew-la.org/